NORTHTOWN, 25 oct [MedEx]- La leche materna debe guardarse a la temperatura de la refrigeradora por un periodo no mayor de 48 horas. Hacerlo por más tiempo y a temperaturas más bajas le hacen perder sus efectos antioxidantes.

Los investigadores estadounidenses tomaron 16 muestras de leche materna dentro de las 24 horas de haber sido extraídas de la mama. Las muestras fueron divididas en alícuotas: las frescas apenas extraídas y las refrigeradas a temperaturas de -20 C (temperatura del freezer o 4 C (temperatura de refrigerador). Se midió la actividad antioxidante midiendo la capacidad de las alícuotas frescas para inhibir la oxidación de 2,29-azino-di-3-(ethylbenzthiazolinesulphonate) a su radical catión y se comparó esta actividad con la actividad del Trolox - un potente antioxidante derivado de la vitamina E. Las alícuotas refrigeradas fueron medidas a las 48 horas y a los 7 días. Los resultados revelaron que las alícuotas refrigeradas a temperatura de freezer y de refrigerador redujeron significativamente su capacidad antioxidante. Siendo mucho mayor la pérdida de la capacidad antioxidante en las alícuotas del freezer. Almacenar las muestras por 7 días reduce más la capacidad antioxidante que almacenarlas 48 horas. No hubo diferencias en actividad antioxidante entre la leche de las madres que tuvieron prematuros y las que tuvieron hijos a término. Hubo significativamente menos capacidad oxidativa en las fórmulas artificiales de leche que en la leche materna fresca. Los autores explican que la capacidad antioxidante de las leche materna disminuye con el almacenamiento y para preservar esta capacidad antioxidante la leche no debería ser almacenada por más de 48 horas a la temperatura del refrigerador - no del freezer. La capacidad antioxidante de las fórmulas artificiales no cambia con el almacenamiento porque la grasa soluble y las vitaminas son estables pero la actividad enzimática antioxidante de la leche materna si es degradada con el almacenamiento. El estudio es interesante porque la leche materna es con frecuencia extraída y almacenada antes de ser usada y es la primera vez que se estudia su capacidad oxidativa. Esta capacidad podría explicar la protección de la leche materna contra el desarrollo de enterocolitis necrotizante y retinopatía en los prematuros (ellos tienen deficiencia en sus defensas antioxidantes).

[Fuente]- Edicion de Archives of Diseases in Childhood, Fetal and Neonatal Edition de octubre de 2004.

[Tipo de Estudio]- Estudio de casos y controles. Autocontrolado.

[Asignación]- Se estudiaron 16 muestras de leche materna

[Autor]- N. Hanna y colegas

[Centro]- UMDNJ–Robert Wood Johnson Medical School en New Brunswick, New Jersey

[Cita]- Arch Dis Child Fetal Neonatal Ed [ta] 2004 [dp] 89 [vi] F518-F520 [pg]

[DOI]- N/A

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