NORTHTOWN, 12 Mar [MedEx]- El hombre no recuerda los acontecimientos de sus primeros años por que esas vivencias se grabaron en un formato distinto antes de aprender al lenguaje.

Los investigadores de Nueva Zelanda asistieron a la casa de los pequeños, para jugar un juego específico. En visitas sucesivas, por un periodo de seis meses a un año se les pidió a los niños que describan con palabras el juego, que reconozcan imágenes del juego y que reproduzcan el juego. Los padres debían confeccionar una lista de las palabras que el niño conocía en el momento del juego y en cada visita de seguimiento. Los resultados arrojaron que los niños fueron capaces de describir el juego, reconocer las imágenes y replicar el juego. Pero no fueron capaces de relatar sus recuerdos del juego utilizando palabras que habían aprendido después. Es decir, todos los niños describieron el juego con palabras que sabían en el momento del juego y no con las que conocían en el momento de la prueba. La descripción verbal estaba congelada en el tiempo a las palabras que conocían en ese momento. Los niños no pudieron traducir vivencias preverbales a pesar de que conocen el vocabulario suficiente para describirlas.

[Fuente]- Edición de Mayo del 2002 del Journal Psychological Science

[Tipo de Estudio]- Estudio prospectivo de cohortes.

[Autor]- Dr. Harlene Hayne y colegas.

[Centro]- Early Learning Project at the University of Otago in Dunedin, New Zealand

[Cita]- Psychol Sci [ta] 2002 [dp] 13 [vi] [pg]

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